La elección de los efectivos del Batallón Asencio que participaron de la búsqueda de Micaela Onrrubio en Villa Rodríguez, pasó por una exigente etapa destinada a encontrar los mejor calificados. Durante diez días tres oficiales y treinta efectivos de todas las jerarquías rastrillaron más de 100 kilómetros cuadrados, a veces con el agua al cuello y en condiciones climáticas adversas.
Hasta con el agua al cuello los soldados de la Brigada de Infantería Nº 2 buscaron a Micaela Onrrubio por diversos cursos y más de 100 kilómetros cuadrados.
Ayer se cumplió un mes de la de-saparición de esta mujer en la zona de Villa Rodríguez y en la extensa búsqueda que se cumplió intervinieron 200 efectivos de 11 zonas de Batallones de Colonia, Mercedes y San José y de la propia brigada.
El jefe del Batallón de Infantería Nº 5 Teniente Coronel Andrés León, indicó que la operación de rastrillaje requirió personal que supiera operar en todo terreno con una gran capacidad física, pues se trabajó desde las primeras horas de la mañana hasta la caída del sol.
Del Batallón Asencio participaron durante 10 días 3 Oficiales y 30 efectivos de todas las jerarquías, entre Sargentos, Cabos y Soldados.
La zona de operaciones se fijó en un gimnasio cerrado de Villa Rodríguez donde además estaba preparada toda la zona de descanso para quienes intervinieron durante 10 días de la búsqueda de Micaela. Apoyando esta tarea desde la Unidad de Mercedes se llevó un dron y personal especializado en su manejo, con el que se tomaron fotografías aéreas mientras que los efectivos realizaban el rastrillaje.
León explicó que esta tarea requiere una gran precisión porque los efectivos se alinean con una distancia de un metro y medio y así comienzan a avanzar en el terreno llevando palos o varas con la finalidad de ir tocando todas las zonas para detectar cualquier irregularidad en el terreno. Señaló que es una actividad agotadora, pero es la forma adecuada, encontrándose además con mucho monte indígena, sectores de terreno sucios e incluso varios cursos de agua donde ingresaron los efectivos, recorriéndose los mismos con el agua al cuello y temperaturas que no eran las ideales.
“La búsqueda que realizó el Ejército fue demarcada por el Ministerio del Interior en base a indicios. Durante los días en que se estuvo trabajando, en varias oportunidades se acercaban los vecinos aportando nuevos indicios o pidiendo que se buscara en un determinado lugar, interfiriendo en algunos casos con la tarea que se venía desarrollando. Pero en realidad, todos querían colaborar.
La policía marcó alrededor de nueve áreas extensas que totalizaron 100 kilómetros cuadrados comenzándose la labor todos los días sobre las 7.30 de la mañana y se culminaba al atardecer. Fueron 20 mil horas/hombre las que cumplieron los efectivos del Ejército.
Las condiciones de búsqueda fueron bastante duras debido a las condiciones del terreno y aunque el tiempo ayudó desde el inicio que fue el sábado 13 hasta el lunes 22, igualmente descendía la temperatura principalmente en la mañana y en horas de la tardecita.
Los efectivos sólo descansaban para almorzar y el terreno rastrillado fue realmente extenso”.
Por su parte, el Comandante Claudio Feola afirmó que si desde el Ministerio del Interior se les convoca para participar de una nueva búsqueda se destinarán los efectivos que sean necesarios.